¿La información que circula en Facebook y Twitter es confiable?

La respuesta es sí y no. ¿Cómo es posible eso? Bueno, lo que intento decir es que en determinados casos sí lo es y en otros no. Me explico. Para que una información pueda ser considerada confiable debemos observar dos características:

• La reputación del usuario y
• Su capacidad de verificación.

Esa es una fórmula que yo aplico siempre a toda información a la cual hago RT en Twitter o publico en mi perfil de Facebook. Aunque a veces #yoconfieso que he pecado, y por desesperado, he terminado publicando información inexacta, asumiendo luego, las consecuencias pocos gratas de esa acción irresponsable.

Reputación del usuario:

Para algunos, esto de la reputación del usuario puede ser considerado como una acción discriminatoria, y hasta me pueden acusar de solo considerar los tweets o las publicaciones de algunas personas a las que se les considera o se consideran, los y las “star de las redes sociales”, pero no es cierto.

Todos a diario con nuestros tweets o publicaciones en Facebook nos forjamos una reputación, ya sea como “el periodista digital”, “el gurú de las redes sociales”, “el que más sabe sobre tecnología”, “el don o doña alegría”, “el opinólogo”, entre otros ejemplos. Eso quiere decir que la información que publiquemos será juzgada en base a esa reputación y no debemos molestarnos por eso.

Verificación:

En cuanto a la verificación, este debe ser un ejercicio básico de todo usuario de las redes sociales tanto para no mellar nuestra reputación haciendo RT o publicando en Facebook información errónea, como para evitar ser parte de una cadena datos falsos que busquen perjudicar a otro usuario o a una institución.

Los periodistas deben guardar especial cuidado al momento al relacionarse con las redes sociales, porque a veces la tentación es grande y por el afán de ser el primero en publicar el dato y ganar la primicia, podemos exponernos y sobre todo exponer a nuestro medio a una “patina” monumental.

Conclusión:

Por lo planteado anteriormente puedo concluir que tanto Twitter y Facebook pueden ser consideradas como dos excelente fuente de información confiable, si es que usamos los filtros adecuados, claro está.